DANI FLACO

Daniel Sánchez García, conocido como Dani Flaco, nació en el barrio de Bellvitge (Hospitalet de Llobregat) en 1977.

Dani era un niño flaco (de dicha característica derivó su nombre artístico) que jugaba muy bien al futbol. Una lesión terminó con su carrera como deportista, casualidad que incluyó –juntamente con el esfuerzo personal- a que el artista se centrara más plenamente en la música.

Inició solfeo con diez años y, tiempo después, gracias a su habilidad con la guitarra, estuvo de gira por España con grupos como Bosquimano y Matari. Posteriormente también formó parte de bandas como Moussa y Camálics.

Quería dejar de trabajar en la Seat, poder llegar a hacer lo que realmente amaba y vivir de ello. Como muchos de los que llegan muy arriba, empezó tocando en bares pequeños, acompañado de su voz y su guitarra y ganándose de forma directa e íntima al público.

Consiguió sacar su primera maqueta “La virgen del exceso”, la cual repartió a amigos y conocidos. Agotada la tirada de la primera, grabó “Espejos”, su segunda maqueta, repartiéndola a todos los que estuviesen dispuestos a escuchar par dar a conocer paulatinamente su música.

Dani era el autor de la música y de la letra de todas sus canciones, como por ejemplo “Cenicienta”, “Quizás sea el mar”, “Desapareció”, “Elena”, canciones que atrapaban al público y lo multiplicaban en cada concierto. Su voz rasgada era, y sigue siendo, cronista de una urbe que encierra pasiones, desamores y marginalidad.

La discográfica Vicious Records confió en él y en 2006 sacó su primer disco, Salida de Emergencia, título que hace referencia a la música como camino, como salvación. En 2008 salió su segundo disco, llamado Fuerzas de Flaqueza. Ambos discos son una combinación de rock, con un toque de rumba catalana y ranchera que narran des de la individualidad, el mundo que lo rodea.

Laura-Amanda Bahí i Horrillo